Esta historia empieza con una llamada allá por el año 2010, ocupando yo el cargo de responsable mundial de compras de una multinacional. El entonces mi jefe me dijo que debía «mejorar la comunicación con mi equipo» (por aquel entonces más de cincuenta compradores de casi otras tantas nacionalidades). La primera formación fue sobre comunicación, de ésta pasé a Inteligencia Emocional y continué por Programación Neurolingüística en diversos cursos en EE.UU. y el Reino Unido.
Hasta aquí nada interesante, pero lo que realmente aporta es mi experiencia: